Los analistas consideran que la descentralización, la descarbonización y la digitalización son los principales pilares de la transformación del sistema energético mundial, así como la mayor necesidad de flexibilidad. Esto, dicen, conducirá al crecimiento, especialmente en tecnologías como los sistemas de almacenamiento de energía de baterías y las plantas de energía virtual.
Según la compañía estadounidense de análisis de mercados Frost & Sullivan, la década actual es crucial para los actores de la industria energética. “La descentralización, la descarbonización y la digitalización son los tres pilares principales del cambio energético mundial”, dice el analista Vasanth Krishnan. A su juicio, la creciente necesidad de flexibilidad es la tendencia más importante que se observa en los mercados desarrollados. Como resultado, hay una demanda creciente entre los proveedores de energía, los proveedores de servicios y los consumidores de tecnologías apropiadas, por ejemplo, de sistemas de almacenamiento de energía con baterías y centrales eléctricas virtuales o incluso de centrales eléctricas de gas y control de la carga.
Según el informe ”Growth Opportunities from Decarbonization in the Global Power Market 2019-2030” (“Oportunidades de crecimiento a partir de la descarbonización en el mercado mundial de la energía 2019-2030″), es probable que se acelere la transición a las energías renovables, mientras que el carbón experimentará un descenso en la mayoría de los mercados desarrollados. Se espera que la expansión de la energía fotovoltaica y eólica crezca a pasos agigantados en esta década, con inversiones en estas tecnologías por un total de 2,72 billones de dólares. Para 2030, los analistas esperan que un buen 54% de la capacidad de generación instalada provenga de las energías renovables en su conjunto y algo menos del 38% de la energía fotovoltaica y eólica.
Según Frost & Sullivan, las oportunidades de crecimiento de los participantes en el mercado variarán mucho de una región a otra. Para Europa, los analistas esperan que se inviertan 12.910 millones de dólares anuales en el almacenamiento con baterías para 2030. Se espera que la capacidad total instalada aumente de 2,91 GW en 2019 a 70,02 GW en 2030.
También se prevé que el mercado interno de almacenamiento de baterías crezca rápidamente en China. El hecho de que el país, que ya tiene el 62% de la capacidad de producción mundial de almacenamiento de baterías, esté invirtiendo en una mayor expansión de la capacidad también provocará una caída de los precios de las baterías. En América del Norte, los analistas suponen que el mercado de servicios energéticos y los correspondientes acuerdos de servicios crecerán debido a los altos costos de la energía. En la India, consideran que los costos competitivos de los proyectos fotovoltaicos y eólicos son la clave de las inversiones futuras. Y en Oriente Medio, se espera que Arabia Saudí, los Emiratos Árabes Unidos, Qatar e Irán sean mercados importantes para la energía fotovoltaica.
FUENTE: PV MAGAZINE