La autogeneración de energía se ha convertido un tema recurrente en el sector industrial, el cual cada día ve esta práctica , no solo como una estrategia para reducir los costos de producción, sino también como el mecanismo ideal para generar en su interior dinámicas de producción más limpias y amigables con el planeta.
La energía solar o fotovoltaica, en especial, es una aliada fundamental para las empresas, ya que además de proporcionar energía limpia, les permite reducir considerablemente los costos de producción.
El sector de los hidrocarburos, se ha dejado seducir por el ahorro en costos de energía eléctrica y ha venido equipando sus plantas petrolíferas con instalaciones de paneles solares. Además de reducir el gasto de dinero en pagos por concepto de consumo de electricidad, la empresa colombiana se ratifica en uno de sus propósitos de responsabilidad social relativo a una producción más limpia y sostenible de la mano de las energías renovables.
De acuerdo con cifras de la empresa internacional asesora en temas de optimización energética, Efizity, una planta de producción puede ahorrar hasta el 40 % en costos de energía al poner en funcionamiento sistemas como los fotovoltaicos. Esta fue una de las principales motivaciones para Ecopetrol que, el año pasado, inició operaciones en el Parque Solar Castilla, ubicado en Castilla La Nueva, municipio del Meta. (Lea aquí: Ecopetrol construirá el mayor centro de autogeneración de energía del país)
Con una inversión cercana a los 20 millones de dólares, la empresa petrolera encomendó su construcción para que se garantice el suministro de energía por al menos 15 años. Durante su entrega, el presidente de Ecopetrol, Felipe Bayón, destacó cómo la generación de energía solar convive de manera armónica con la producción de los hidrocarburos, lo que por supuesto conlleva prácticas ambientales mucho más responsables.
Esta planta, localizada en el campo petrolero de Castilla - el segundo con más producción en el país con cerca de 115.000 barriles de petróleo por día -, cuenta con una potencia instalada de 21 megavatios, capacidad suficiente para proveer de energía a una población de 27.000 habitantes.
La prioridad, en el marco de la responsabilidad social del sector de los hidrocarburos, es reducir el impacto ambiental de sus operaciones y de sus productos mediante la utilización y aprovechamiento de fuentes de energía más limpias y un uso eficiente de éstas.
El potencial que tiene Colombia para desarrollar energías renovables, tanto por su localización geográfica como por su talento humano, hace que las empresas del sector de los hidrocarburos se conviertan en las primeras aliadas y en fuente de financiación y asesoría para desarrollar proyectos que promuevan la implementación de fuentes de energía alternativas.
Un sector líder
No suele darse muy frecuentemente una situación en la que una inversión genere al mismo tiempo ganancias y beneficio ambiental, pero este es el caso que experimentan actualmente varias empresas que producen su propia energía para suplir las necesidades de su operación. Desarrollo industrial amigable con el planeta es posible gracias a la inversión de compañías, como las productoras de hidrocarburos, y al aprovechamiento de los recursos naturales que en Colombia se encuentran en abundancia. (Lea aquí: Energías renovables, el futuro del Caribe colombiano)
Es muy importante que un sector como el petrolero lidere este tipo de iniciativas que implican un ahorro bastante importante en emisiones de CO2 a la atmósfera. Generalmente vistas como agentes productores de contaminación, las empresas de este segmento tan importante de la economía del país exploran constantemente alternativas de energía renovables que protejan los recursos naturales de la nación y que se conviertan en acciones significativas en contra del calentamiento global.
Al estar abierto y dispuesto a realizar acciones inteligentemente ambientales, este sector industrial comienza a destacarse como un actor líder en llevar a cabo prácticas productivas cada vez con menor impacto ambiental, haciendo un uso responsable de los recursos naturales y aplicando los desarrollos tecnológicos para el bienestar, no solo del país, sino también del planeta entero.
Reducir toneladas de emisiones de CO2 en el aire, así como los gastos de operación, son dos poderosas razones para que la industria petrolera de Colombia invierta en el desarrollo de fuentes alternativas de energía, las cuales, por su relación costo - beneficio, ahora son vistas no como una opción para tener en cuenta, sino como una realidad de la cual todos nos podemos beneficiar.
FUENTE: EL ESPECTADOR