La firma buscará vender unas 200 unidades de este tipo de vehículos, en especial en el sector público y corporativo, donde ve grandes posibilidades de crecimiento en 2018.
Con la idea de replantear su estrategia en comercialización de eléctricos e híbridos, Mitsubishi le apunta al sector público y corporativo para vender gran parte de las 200 unidades proyectadas de este tipo de vehículos durante el 2018.
En diálogo con Portafolio, Marco Pastrana, gerente general de Mitsubishi para Colombia, dijo que en una segunda fase de transición, entre el 2020 y el 2021, podrían volcarse de nuevo en el mercado del cliente uno a uno.
En el informe de Andi y Fenalco se evidencia que el año pasado Mitsubishi vendió 1.373 unidades, lo cual significó una caída de 9,1% comparado al 2016, ¿por qué se dio esta disminución?
La caída es porque básicamente no tuvimos tres productos en portafolio, que fueron sacados en el 2017. En el 2016, tuvimos unas ventas de automóviles que fueron de la línea Lancer y la Mirage. Por temas estratégicos de la compañía no vamos a centrarnos por ahora en automóviles, sino en camionetas. Adicionalmente, cambiamos la Nativa, que es una camioneta grande que teníamos como ícono de la marca, que estábamos vendiendo hace ocho o nueve años y esta fue cambiada por la nueva Montero Sport.
¿Cómo van este año?
En enero crecimos un 74%, mientras que el mercado cayó 4,8%. Esto, porque tenemos una dinámica muy importante en tema de flotas y corporativos. Somos una marca que está muy enfocada a negocios específicos de utilitarios. Hemos tenido muy buen desempeño en carros blindados, en pick ups para grandes empresas petroleras y ahora el Runt, con corte al 20 de febrero de este año, indica que vamos creciendo un 107%. Esto quiere decir que la dinámica que nos propusimos para estar en el mercado va un poco en contravía con el sector económico, porque estamos orientados a venderles a empresas y todos esos proyectos 4G de infraestructura.
¿Cuántas unidades tienen proyectadas vender este año?
Unas 1.800 unidades, de las cuales tenemos un componente bastante importante también en vehículos eléctricos e híbridos. Esperamos vender 200 unidades, entre eléctricos e híbridos, beneficiándonos del decreto del Gobierno que entró en vigencia el año, donde hay unos 4.500 cupos disponibles; creo que este año son 1.500 vehículos que van a poder entrar.
¿Por qué cree que la industria no va a utilizar todos los cupos?
Porque no hay conocimiento en la venta de eléctricos todavía en el país y hay muchas fábricas que no han liberado este tipo de carros para Colombia. Tienen mucho miedo del tema de falta de infraestructura, recarga, pero nosotros en Mitsubishi desde el 2011 empezamos a vender los primeros eléctricos y hemos tenido flotas muy interesantes como Codensa y EPM, que ya han probado los vehículos. Están bastante interesados en seguir renovándolos. Tenemos pensado vender unas Outlander híbridas, por lo que ya empezamos a hablar con algunas alcaldías, y también con el i-MiEV, esperamos llegar a las 200 unidades este año.
A medida que este mercado empiece a crecer, ¿los altos precios bajarán en algún momento?
Sí, porque en la medida en que las tecnologías van siendo más avanzadas los componentes eléctricos van bajando. Pensamos que en la medida en que el mercado vaya creciendo habrá oportunidades, sobre todo arrancando con transporte público.
El problema es que inicialmente estábamos orientados al cliente final uno a uno, pero nos dimos cuenta que ese tema, sobre todo por conciencia ambiental y por regulaciones regionales y nacionales, tienen que arrancar por el transporte público.
Toda la parte de renovación de flotas de taxis, carros de placa blanca y de transporte especial, están migrando hacia tecnologías limpias y ahí es donde nosotros vemos un potencial de crecimiento. Cuando el transporte público tenga el volumen suficiente, hará que más adelante el cliente uno a uno empiece a interesarse en estos carros y su funcionamiento.
Es una estrategia que no habíamos visto anteriormente, pero es la que va a funcionar. Por lo menos en Medellín ya hay un decreto que abre nuevos cupos, para más de 1.500 taxis, pero tienen que ser 100% eléctricos.
La segunda fase de transición que puede ser en el 2020 o 2021 podría estar orientada al cliente uno a uno, pero por ahora estamos concentrados en temas corporativos.
Igualmente, hay muchas empresas que necesitan reducir la huella de carbono, lo cual permite cumplir metas de la casa matriz que tienen algunas multinacionales. En Bogotá, Medellín y Cali, está enfocada nuestra estrategia.
Fuente: PORTAFOLIO