Dentro de una serie de propuestas para lograr que los usuarios puedan optimizar el consumo eléctrico UTE quiere implementar tarifas prepagas de energía. Además, con la instalación de medidores inteligentes que la empresa ya está llevando adelante, los hogares podrán tener un mayor control en la utilización de energía, saber si se está malgastando e incluso protegerse de robos.
El presidente del ente, Gonzalo Casaravilla, indicó que ya se instalaron 6.500 medidores inteligentes de energía y la intención es continuar avanzando con el plan ya que permiten efectuar controles no previstos para los dispositivos anteriores. Entre una de las posibilidades que ofrece, el jerarca mencionó que permite el corte o la reconexión de energía de manera remota.
“Uno se va de la casa y a 100 kilómetros se acuerda que olvidó apagar la llave general, en ese caso ¿pagaría $ 50 pesos por agarrar el celular, apretar un botón y hacer la desconexión? Podría hacerlo”, dijo Casaravilla en el programa “¿Quién es quién?” de Diamante FM y Televisión Nacional.
Otra posibilidad es programar un nivel mínimo y máximo de consumo y si la demanda sale de ese rango, enviar un mensaje de texto o avisar por teléfono.
Casaravilla lo manejó como una opción para “algún automatismo que alguno se olvidó, como pasó en el invierno que alguien dejó prendido un aire acondicionado cuando se fue y después tuvimos la notica que había gastado mucho y él no estaba, pero había estado prendido el aire a todo trapo”.
Uno de los proyectos en los que trabaja UTE es en la implementación de un sistema de tarifa prepaga de energía. “Como las tarjetas; poder cargar la casa con tanta energía y después se le avisa cuando está por llegar al límite o se le puede avisar que tiene contratada determinada potencia y parece que algo está conectado de más y dentro de un rato le va a saltar la llave térmica”, explicó el jerarca.
“El prepago también puede servir a alguien que alquila su casa o que le presta la vivienda a alguien”, complementó. Además, señaló que la idea es avisarle al cliente cuando está por expirar el crédito, pero cuando efectivamente se termina no cortar el suministro. “Simplemente se le permitirá un consumo mínimo para mantener la heladera o las cosas básicas prendidas”, expresó. “Todo se puede hacer pero hay que ir a la misma velocidad que la gente, todas estas cosas avanzarán en la medida que el mercado y las personas demanden los productos”, dijo.
A su vez, explicó que anualmente se cambian cerca de 100 mil medidores por año, dentro de un total de 1.450.000 clientes. Informó que todos los consumidores industriales, unos 100 mil, ya tienen los dispositivos inteligentes. Por eso, la intención actual es apuntar a los clientes residenciales.
“Con los medidores inteligentes que están instalados se están detectando cosas, como fraudes o hurtos de energía eléctrica; se está desarrollando un plan de inspecciones zonales y se encuentran cosas de ese tipo. Se está trabajando con la Fiscalía y hay gente que termina presa”, finalizó.
FUENTE: EL OBSERVADOR