Nicaragua es el país Centroamérica con los costos de energía más cara en la región, seguido por Honduras y Costa Rica.
Los datos se desprenden del análisis hecho por el sitio especializado GlobalPetrolPrices.com, que monitorea al costo de los precios retail de insumos como la electricidad, combustibles y gas natural en 150 países.
De acuerdo con dicho monitoreo, en Nicaragua las empresas pagaron -hasta marzo de 2019- US$0,24 por cada kilowatt/hora (kWh) que demandaron en sus procesos productivos.
En tanto, en Costa Rica como en Honduras el valor del kWh fue de US$0,22 el kWh, en Panamá el valor era de US$0,20, en El Salvador de US$0,19, en Belice de US$0,18, mientras que el más bajo de la región es el de Guatemala con US$0,16.
GlobalPetrolPrices.com también enlista los costos para hogares, sin embargo, este no refleja cuánto se paga en Nicaragua, pero sí los del resto de países de la región donde se invierten los indicadores para los países con precios más altos.
Los hogares pagaron por kWh -hasta marzo- US$0,16 en Honduras, US$0,15 en Costa Rica, US$0,18 en Panamá, US$0,22 en Belice y US$0,25 en El Salvador y Guatemala.
Costa Rica busca abaratar los costos industriales
¿Realmente las diferencias en el precio del kWh que se cobra en el país con respecto al resto de la región geográfica y económica más cercana puede provocar la salida de empresas agobiadas por el costo de producción? Las respuesta es sí a la luz de los hechos recientes.
Hace menos de un mes la empresa Vidriera Centroamericana (Vicesa), presionada por la disminución en la demanda y el precio de los insumos para producir, anunció el cierre parcial de sus operaciones en Costa Rica para trasladarlas a Guatemala.
Uno de los argumentos de la empresa para justificar el cese de operaciones de uno de sus hornos fundidores fue que el costo de la electricidad en mediana tensión es un 46,6% más cara aquí que en Guatemala.
De acuerdo con los datos a marzo que muestra en su sitio web GlobalPetrolPrices.com la diferencia en el costo del kWh entre ambos países a esa altura del presente año era de un 27,2%, más barato en Guatemala.
Las preocupaciones de Vicesa las han reproducido los representantes del sector industrial en repetidas ocasiones, al citar el costo de la electricidad como uno de los lastres que impiden que la producción costarricense logre levantar vuelo de nuevo.
En un tema asociado, por ejemplo, la Cámara de Industrias de Costa Rica (CICR) desmintió a finales de octubre a la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) respecto del precio del búnker, combustible que se utiliza primordialmente para la producción de energía eléctrica. Según los industriales, en el país se paga un 17% más de lo que ese producto cuesta en Guatemala.
Impacto en el desempleo
El diputado Pedro Muñoz, de la Unidad Social Cristiana (PUSC), ligó el costo de la electricidad con el elevado desempleo (11,4%, según la Encuesta Continua de Empleo) que desvive al país en la actualidad.
Durante una intervención en el plenario, a principios de noviembre, el legislador se basó en datos de la Comisión Económica para América Latina (Cepal) de la ONU, para denunciar que en Costa Rica se le cobra a las empresas el costo más alto por electricidad.
Muñoz afirmó que en el 2016, la tarifa industrial por 100.000 kWh 274 kW, fue de US$18,47 en Costa Rica, mientras que Belice fue de US$15,23, de US$11,03 en El Salvador, de US$11,54 en Guatemala, de US$12,52 en Guatemala, de US$16,45 en Nicaragua, de US$10,92 en Panamá y de US$19,93 en República Dominicana.
“Esto tiene una incidencia directa en el desempleo (…). Necesitamos entender cómo están las finanzas del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) para entender porqué estas tarifas son tan caras en Costa Rica, sino, cuál es el futuro que nos espera”, reclamó el legislador a propósito del debate de un proyecto de ley que levantará el secretismo en el manejo financiero del ICE.
FUENTE: ESTRATEGIA Y NEGOCIOS