Al tiempo que avanza en el objetivo de que en 5 años el 30 por ciento de su producción sea no convencional (eólica y solar), la Empresa de Energía del Pacífico (Epsa)-compañía que hace parte del Grupo Antioqueño, al que pertenecen Bancolombia, Cementos Argos, Odinsa y Nutresa, entre otras firmas- sigue invirtiendo en las fuentes convencionales.
En efecto, Epsa, Epsa Inversiones y la sociedad Geoproduction Oil & Gas adquirirán un porcentaje accionario de Proeléctrica del Archipiélago, firma que construirá una central de energía eléctrica a gas en el municipio de Sahagún, Córdoba, y que tendrá una capacidad instalada de 250 megavatios.
Epsa es controlada por el Grupo Argos, que a través de la firma Celsia participa en el negocio de generación y comercialización de energía.
Entre las firmas que controla directa o indirectamente se cuentan Zona Franca Celsia, la Compañía de Electricidad de Tuluá y 18 plantas hidroeléctricas en Antioquia, Valle del Cauca, Cauca y Tolima.
En el 2018, los ingresos consolidados de Epsa registraron 1,77 billones de pesos, con un aumento de 7 por ciento, frente al 2017, debido principalmente al incremento en la unidad de comercialización minorista.
Por su parte, según explica la empresa, los activos corrientes sumaron 536.907 millones de pesos, con un aumento de 44 por ciento, frente al 2017.
La principal variación se presentó con los inventarios de materiales para los proyectos en construcción y por el incremento del efectivo.
“El resultado también fue favorable debido a la mayor contribución por el buen desempeño de los negocios y a la menor carga financiera que resulta de las
gestiones para mejorar la estructura de capital”, agregó la compañía en su reciente informe de gestión.
Por su lado, Geoproduction es una sociedad extranjera dedicada a la exploración de petróleo y gas, que hoy tiene presencia en Colombia a través de Geoproduction Oil & Gas Company Of Colombia.
Sin embargo, no participa en las actividades del sector eléctrico y a través de esta operación tiene la intención de invertir en el mercado de generación y comercialización de energía nacional.
FUENTE: EL TIEMPO