El país estrenará el año entrante una nueva planta solar, sobre espejo de agua, la cual comenzará su montaje en cuestión de días. Se trata de ‘Aquasol’, complejo fotovoltaico flotante , el cual se desarrollará en la Centra Hidroeléctrica de Urrá I (CHU-I), localizada en el departamento de Córdoba.
Con la firma del acta de inicio de la obra, entre el presidente de la compañía, Rafael Piedrahíta de León, y el representante legal de la Unión Temporal Sol & Agua, Gerónimo Cabal Villamizar, a quienes se adjudicó el contrato para el Diseño, Ingeniería de Detalle, Suministro, Construcción, Montaje, Pruebas, Puesta en Servicio y, Operación y Mantenimiento, se dio el primer paso para la construcción de esto complejo de energía renovable no convencional.
“El proyecto solar fotovoltaico flotante ‘Aquasol’ es el primero en el país, con una capacidad instalada de 1,5 megavatios (MW), el cual se conectará a casa de máquinas y alimentará parte de los consumos propios de la CHU-I, cuya entrada en operación se prevé para agosto del 2022”, señaló en diálogo con Portafolio, Rafael Piedrahíta de León.
Agregó que la central hidroeléctrica está trabajando en la diversificación de su matriz de generación de energía eléctrica, y apuesta por las energías limpias y renovables para avanzar hacia un modelo de negocio sostenible, seguro y competitivo.
También afirmó que “en este sentido, la generación solar fotovoltaica es uno de los focos de la compañía, con lo cual se alinea al Objetivo de Desarrollo Sostenible 7 ‘Energía asequible y no contaminante’, y al ODS 12 ‘Acción por el clima’, al adoptar y planificar medidas que combatan el cambio climático y sus efectos”.
Así mismo, precisó que los sistemas flotantes de paneles presentan un desempeño energético superior al 10% o 15%, frente a los sistemas tradicionales como los parques solares tierra o los techos fotovoltaicos, gracias a su cercanía con el agua, ya que les permite estar más refrigerados y aprovechan la mayor radiación que refleja el agua con respecto a la tierra.
“Se habla de una alta eficiencia debido a que la temperatura es menor y los paneles trabajan con mayor eficacia, ya que se calientan menos, así las pérdidas por calor son menores. El agua actuaría como una especie de refrigerante. Adicionalmente, el proyecto tendría un acceso fácil al punto de conexión”, agregó el presidente de la CHU-I.
El proyecto, que ya finalizó su etapa de estructuración, trazó en su planeación el utilizar 1,7 hectáreas del gran embalse, para producir 1.500 kilovatios de esta energía limpia, que se prevé esté disponible en el tercer trimestre del 2022.
Este proyecto piloto, además, permitirá evaluar la posibilidad de construir una iniciativa de mayor tamaño y capacidad de generación. En su montaje se utilizarán 5.600 paneles solares, que estarán apoyados en una estructura flotante. Además contará con dispositivos de anclaje, sujeción en sitio, inversores, medición bidireccional y dispositivos de comunicaciones en tiempo real.
“La obra permitirá desarrollar líneas de estudio ambiental, energético y regulatorio, hará parte del laboratorio experimental de energía solar fotovoltaica que la empresa implementará próximamente, y en el ámbito comercial permitirá comparar la tecnología solar fotovoltaica flotante con la solar fotovoltaica sobre tierra (en energía anual generada)”, manifestó el presidente de CHU-I.